viernes, 5 de abril de 2013

POR LA BOCA MUERE EL PEZ

Sorprendo a mi botijo, madrugador como él solo, hojeando las ediciones digitales del ABC y de El País.  Le noto inquieto y le interrogo sobre las causas de su inquietud.  Se explica y, una vez más, coincidimos en el análisis y en las conclusiones del asunto.



"Estamos en una situación en la que vale todo a efectos de publicación en los medios de comunicación".  Esta es, textualmente, una de las perlas cultivadas por Ignacio González (Presidente de la Comunidad de Madrid).
Otra mas:  "Deberíamos establecer un límite porque el daño que eso produce a las personas y a la institución se tendría que cuidar".

Nada nuevo bajo el sol.  Después del derecho a la huelga y del derecho a manifestarse, habrá que "modular" la libertad de prensa y la libertad de expresión, faltaría más.  No merece la pena hacer comentarios sobre la catadura moral y el nivel intelectual de quien se permite, sin rubor, soltar sandeces como las citadas.  Eso si, tendremos que seguir escuchando necedades de besugos (*) como este al que le importan un bledo los problemas y los intereses de los ciudadanos. 

Lo que da un valor añadido a la fotografía de Nuñez Feijoo con Marcial Dorado es, precisamente, la condición de las personas que aparecen en la imagen.  Y ese valor añadido puede haber existido en el momento de la instantánea o puede generarse posteriormente.  Justamente por ello el hecho noticiable tiene relevancia y esa relevancia objetiva no puede quedar al albur de que los vientos soplen en una u otra dirección.  Quien se ha situado voluntariamente en el ojo del huracán no puede quejarse de acabar despeinado.  Mejor dicho, tiene derecho a quejarse pero no tiene ningún derecho a que su queja sea escuchada.

Me cuenta mi botijo que un primo suyo estuvo presente en el concierto de AC/DC en Donington Park en agosto de 1991 y que, según le contó en su momento, quedaron grabadas en su memoria las siguientes palabras de "Highway to hell":

"Estoy cayendo, siempre hacia abajo.
Estoy en la autopista al infierno."



(*) Según el diccionario de la RAE, "persona torpe o necia".

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